La tos es un reflejo que ayuda a mantener despejada la garganta y las vías respiratorias. Aunque puede ser molesta, la tos es un mecanismo de defensa del cuerpo que le permite mantener el sistema respiratorio despejado por ejemplo de partículas de polvo u otros cuerpos extraños, expulsándolos hacia el exterior.
El organismo tiene varios sistemas de defensa para combatir las enfermedades. En el caso de la garganta y de las vías respiratorias, este proceso se lleva a cabo mediante la tos, un reflejo que puede ser o no voluntario.
La tos se puede producir por una estimulación de la mucosa de los bronquios, la tráquea o la laringe, ya sea por acumulación excesiva de moco en la superficie, sequedad, enfriamiento o ciertas sustancias químicas. Suele ser algo desagradable y, por ello, es primordial ponerle freno con el fin de evitar todas las molestias que puede generar: irritación de garganta, momentos incómodos, malestar a la hora de conciliar el sueño…
Creemos que una vida plena se construye con unas vías respiratorias saludables.